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Cigarrillos sueltos, puchos levantados

Este es el blog de un forista de internet. Y compila aquellos posts que son a la vez respuesta a consignas varias y textos en sí mismos. Son una parte muy mínima de un momento muy mínimo. Estúpidas ocurrencias a la hora de dejar algo escrito en una pantalla y para ser leido con el escaso interés que los foros de internet lamentablemente despiertan. Buddy

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Nombre: Budijoly
Ubicación: Villa Urquiza, Ciudad de Buenos Aires, Argentina

Tecladista y escritor under. Estudié Comunicación (UBA), Comisariado de a bordo, el cuerpo de alguna mujer, cómo dormir chicos y otras atorrancias varias...

martes, noviembre 01, 2005

XXXIV: Acerca del tablero de instrumentos que rodea la PC:

Al costado de la Pc tengo el esqueleto de un pirata de yeso mal pintado, unos porrones de quilmes Crystal e Iguana vacíos, un viejo juego acuático, una flauta ocarina, luces, unos cds vírgenes que no se cuando grabaré, fascículos de una mala colección de Clarín, fotos que quedaron desde que los amigos del asado del sábado las dejaron, Cds grabados que nunca tendrán láminas de temas parece -uno es un compilado de Zeppelin, otros 2 el último de Fito- la taza de café vacío, el cenicero azul lleno, un hornito para defumación, un mouse arratonado (sin cable y con un cordón en el lugar de la cola, la cigarrera de aluminio vacío, un cubo mágico, el Donkey Kong Junior, el Zippo para arreglar, una lámina del tributo a los ramones, la nota sobre el cine en los Simpsons arrancada de Cinemanía, un atado de Philip Morris (no había Marlboro), la foto de Clint Eastwood, Ficciones de Borges, mi gato arriba de las fotos mirando a la calle, una agenda abierta con laburos cerrados, un teléfono antiguo restaurado y en uso, el regalo del día del padre de Luka, unas postales de Boomerang, diskettes que nunca sabré a ciencia cierta si funcan, anotaciones en papelitos que se perderán seguro, un martillito del piano de mi escuela primaria honestamente afanado, el panel de corcho al lado mío en la pared con fotos (Woody Allen, Luka, la petisa y yo), dibujos, entradas a recitales, a boliches y boludeces como una esponja que no se qué mierda hace ahí.

Buddy

XXXIII: Acerca de "comprar, que lindo verbo":

Hoy tenés que tener un celular, porque si no tenes un celular no sos nadie, porque hasta unos pibitos en el bondi andaban con celular, yo los ví, y ahora que tenés el celular conseguite un I-Pod porque cómo vas a tener celular y no tener I-Pod!, mas allá de que en tu casa hayas visto ya el estreno de la semana porque si no ves el estreno de la semana de que mierda vas a hablar, si las noticias son una mierda que te tira para abajo y abajo nadie tiene celular, ni I-pod, apenas ven el estreno de la semana truchado por ahí. Vos podes grabartelas en DVD pero mejor esperá a comprártelas originales nena, y no seas canuta, como esa campera del bordado verde con rayas del insert de la revista, pero que revista estas leyendo si ya salio la nueva, tirala a la basura aunque no la leas, y para! adonde vas? al kiosco con esas zapatillas???, cómo mierda vas a ir al kiosco con esas zapatillas y esa remera??? Anda! cambiate que me pongo un pullover y te acompaño que ando con ganas de comprarme alguna cosa, dale.

Buddy

XXXII: Sobre las fantasías de un locutor radial:

Pensaba que el mundo esta lleno de sombras, desde la oscuridad de este estudio; de sombras y soles, de tinieblas y luz; de vida; de muerte. Desde esta silla, sentado frente al micrófono, recorriendo los dibujos que proyectaba la luz sobre las paredes y entre los papeles sobre la mesa. De día uno puede ver su propia sombra al levantar un zapato, ahí abajo, escondida de la racional luz. Pero por la noche...
Por la noche las sombras se elevan, se dispersan, huyen de las marquesinas, de las calles, de las luciérnagas...
De noche las sombras se elevan sobre los edificios y cubren el cielo.
De noche nosotros tambien somos sombras.
Sombras que descubren que las cosas prohibidas son las que mejor nos salen, y por eso nos alejamos de la luz por la oscuridad, del sol por la penumbra, de Apolo por Dionisios...
Vos sabé porque a vos te escribo, que esto puede no ser real, pero entre las sombras de esta noche yo soy una más que vive de fantasías, y ahora mismo, pienso contarte la fantasía de un tipo como yo, que habla en la radio para cazadores de fantasías que escuchan en la oscuridad.

Estoy solo, haciendo el programa, de vez en cuando me cuelgo mirando el jopito que se peina el humo del cigarrillo mientras se eleva y muere en el aire. Hace calor y el operador -confiando en mi verso- salió a comprarse cigarrillos. O a tomar aire. O a la esquina a ver si llueve, pero no está y entonces entra ella o vos, o alguien más mientras leo una poesía de alguien muy al pedo.
Mejor vos.
Entrás vos.
Y te parás frente a mídel otro lado de la mesa.
Luego te quitó esa boina negra -porque tenés que traer una boina negra- y la lanzás sobre la mesa con una sonrisa.
Me la pongo, al estilo del Ché, algo ladeada.Vos te arrodillás y desaparecés debajo de la mesa.
Mientras yo te hablo por el micrófono, vos gateas. Gateas hasta mí.
Esquivando los cables que llevan mi voz, gateas hasta mí sobre las colillas que se van sembrando y esa eterna mancha de café en el piso. Te quitás la ropa. Desde acá no puedo verte, pero te la sacás....lentamente...acariciando la alfombra hasta llegar a mis piernas...desabrochás con cuidado los botones del jean. El mío porque vos sólo te quedaste con esa remerita, y tirás de el hasta quitármelo.
Me quito la camisa y vos tu remera y ambos quedamos desnudos, completamente desnudos.
Yo sigo hablando porque soy un profesional y vos comenzás a jugar con mi entrepierna, me sonreís te cuidás de no reir al aire donde suena otra vez un Dylan hermoso de largos cabellos y mi voz estropeándolo todo. Así despacio, yo sigo hablando al micrófono mientras vos me parodias debajo de la mesa. Y seguís hasta que te aparto, y te hago salir...
Te apoyo en el borde de la mesa, inclinando tu cuerpo hacia atrás. Te acostás.
Quedas tendida sobre los papeles que no voy a leer, que voy a inventar, que voy a reescribir sobre vos, con palabras que te abandonen...húmeda y feliz.
Tus piernas cuelgan y rozan la alfombra...El micrófono se acomoda sobre tu cabeza...
Tus nalgas mueren en el borde niquelado de la mesa...
Mis labios entre el micrófono y vos...
Tus piernas se abren...
Tus ojos se cierran...
Tus pechos se elevan...
Tus oidos alerta...

Buddy

XXXI: Sobre el después del sudor y los jadeos:

Te caias, agitada sobre mi pecho, o yo caía sobre el tuyo, da igual. Nos besábamos los hombros, el cuello, el pecho mientras tu respiración se nivelaba, se rendía casi como vos un minuto antes. Recién entonces aparecía un te amo, y un beso en los labios -sería la taquicardia o porqué sino nunca me besabas en los labios apenas acababas- luego hablábamos un ratito, de esa noche, de libros, de alguna peli, de algúna materia, de Marianita -cómo nos reímos de las tetas de Marianita!- o de algún angel que pasara entre silencio y vacío.
Casi siempre me pedías un segundo para ir al baño, que te hacías pis, y me echabas la culpa del enchastre que hacíamos en la cama. Mientras yo acomodaba las sábanas sin levantarme. Un cigarrillo era lo primero que agarraba, por ahí la radio -la tele rara vez, no había cable en el depto vacío y siempre se hacía tarde- o un cassette que siempre estaba entre blues viejos, Enya o la banda de sonido de The Piano que tanto nos gustaba entonces.
Volvías, agarrabas un pucho y volvámos a hablar -ahora con más fundamentos y razones- picábamos y tomábamos algo dulce -el cigarrillo ya se estaba haciendo notar- y nos abrazábamos.
Nos reímos de algo seguro. Y por ahá nos levantámos a agarrar un libro, a poner el despertador si pintaba noni, y por las dudas no volvieras a tu casa otra vez media cuadra antes que la tía Tita que venía de visita. Si no, seguíamos con mimos de esos que testean la noche, la persiguen hasta la madrugada siguiente en otro sudor, otra taquicardia.
Otras veces te dormias sobre mi pecho, y era lindo ver tu sonrisa en ese lugar y sentir un segundo antes del sueño ese estertor, esa patadita que pegaban tus músculos rindiéndose a la noche.

Buddy

XXX: Acerca de los olores en la intimidad:


No me importan los aromas en la intimidad hasta que me importan. Puede haber un sahumerio, como puede que no. Algunas veces una velita, un hornillo para perfumación ayudan a crear un clima decorativamente especial. Una habitación no está a oscuras si la vela del hornillo dibuja sombras en la pared, y eso es lindo.Acerca del cuerpo, desodorante en las axilas es suficiente, cualquiera sea el desodorante mientras no se trate de uno de esos que te gritan el aroma a la cara "Che, oleme, acá estoy".
Sobre perfumes: Por ahí la noche trae una salida previa (un recital, un dancing) uno va a tyranspirar y es conveniente un perfume o colonia, yo prefiero Kenzo o Adidas. Aplicando un toque en pecho, un beso detras de las orejas, otro en cada muñeca, y un rocío a la altura del ombligo.
Una cosa que es respetable considerar es la posibilidad de ser homenajeado con una fellatio.
En estos casos recomiendo -por opiniones de amigas- que de ser posible se trate de pasar primero por un baño no publico, claro) y le quiten al muñeco el fuerte olor a pis. En varios foro s de la web, hubo chicas que se quejaban de los olores masculinos, allí abajo. Hay otras chicas a las cuales les gustará pero es bueno saber esto antes.
Acerca de probar partes del cuerpo de una chica con otro sabor u olor (ambos sentidos responden a un mismo impulso químico) recomiendo bañar los pechos, espaldas, pancitas, nalgas, o bocas de las damas en dulce de leche, gnutella, crema chantilly o baño de chocolate.
La crema común suele ser demasiado fría pero no está mal tampoco. Sobre las chicas, ya sabemos los varones, una entrepierna de mujer puede oler a perfume de la ropa o del cuerpo (en general veinteañeras), a un poco de pis (se nota más en las chicas mas jóvenes, y no está mal tampoco, le da un toque de silvestre a la cosa, que es lindo), o al mismo flujo, pero es este ya un olor tan exitante como difícil de describir acá.
Ahora, mi aroma preferido es el que se produce con el mismo acto del sexo, cuando el sudor, los perfumes, las salivas, los desodorantes, el semen y los flujos se vierten sobre los cuerpos calientes y se evaporan, y uno queda al final tirado en esa pieza rodeado de tanta alegría flotando hacia nuestras narices. Cuando hay mucha humedad es sofocante, cuando no y hace frío se genera un vacío. Y qué lindo es a la mañana siguiente reconocer -en una mano, en un brazo, en el pelo- el olor del cuerpo amado la noche anterior, como un deja vu que la mañana te regala.

Buddy

XXIX: Acerca de estar a favor o en contra del aborto (Parte II):

En un foro de internet una vez leí este comentario de una chica que argumentaba en contra de la legalidad del aborto diciendo que el mismo......"no mejoraria la seguridad (...) si fuera libre las putas no se cuidarian por q no habria problemas... y se contagiaria sida...hepatitis todo....en cambio si se cuidan con forro, se salvan de sida, del embarazo, y a las minas que las violaron, disculpenme pero creo que uno las cosas las busca y las provoca...no se si se entiende no tenes que andar por la vida con las tetas en bandeja y el culo a la vissta...por una cuestion de que la cosa no ta pa eso... (...)"
Lo posteo porque los argumentos me parecieron ridículos y sorprendentes en una mina supuestamente joven, me parecieron retrógrados. Pero a la vez me dí cuanta de que ciertas ideas uno las da por supuestas, y que tal vez no son tan así.
1.Yo en verdad, no creo que a las putas les preocupe menos el sida que un embarazo. Del sida -como cualquier enfermedad de contagio sexual- ya saben que no safan, del embarazo aun les queda el aborto clandestino. Con la legalidad del aborto seguirían cuidándose con forro, pero del sida.
2. Otra cosa es que el forro no es totalmente seguro tampoco. Yo he conocido minas que se quejaban de que permanantemente se les rompía o vienen fallados o algun farmacéutico juguetón que lo pincha. Si te vas a cuidar de quedar embarazada y tenés sexo habitualmente yo recomiendo forros con pastillas, viejo.
3. Y hay otra cosa que me parece jodida y en esto me quedo especialmente. Y es el argumento de que las minas son violadas porque se lo buscan vistiendose de un determinado modo. Podemos poner esto entre paréntesis, podemos reirnos y hacer un chiste entre íntimos, pero es peligroso ese argumento porque supone que la apariencia personal da derecho al otro a realizar un acto en uno. Y eso es lo mismo que decir que te pueden llevar detenido por usar zapatillas de goma, pelo largo, colgantes con jeringas o tatuajes del ratón Mickey. No alimentemos prejuicios, podemos guiar nuestra percepción por ellos, sí; pero no darle cabida como argumento en una discusión porque más allá de peligroso es un grosso error.

Buddy

XXVIII: Sobre "tus ropas caen lentamente, soy un espía un espectador":

(o el modo correcto de desvestirse de a dos)
Yo siempre empecé por la camisa y/o remera, pero sin pensar en mostrar los abdominales ni la espalda, solo por comodidad y porque hay que ir paso por paso.
Aunque por lo general, basta cruzar la puerta del cuarto o depto para que empiece una lucha libre de besos y manotazos (alguna vez anticipada en el ascensor, o en el auto), y las manos quiten corpiños y desabrochen cinturones mientras las bocas se entretienen. Una mano a la entrepierna de ella (si es dentro del pantalón o por debajo de la pollera) y la boca que se desliza por el cuello hacia la oreja, baja por el hombro lentamente, y se zambulle en el escote.
Para este momento ella me revuelve el cabello, quitando su mano de mi pantalón desabrochado, sabiendo que he ganado la zona baja. Su camisa se abre a mis labios, que con ayuda de la lengua bordean y levantan el corpiño suelto. Una recorrida por los pezones para testear la temperatura y sin quitar la mano de su entrepierna me arrodillo a recorrer la depresión del estómago. Con la base de la lengua rodeo su ombligo, dejo unas gotas de saliva que se deslizan hacia abajo anticipándome. Mis manos ayudan a quitarle la tanga, para este momento ya sobra, la acompañan hasta las rodillas donde pueden caer libres.
Ellas suelen apoyarse en una pared, sujetando mi cabeza mientras arrivo a sus templos de placer. Algunas veces logro llegar a la cama, con toda mi ropa puesta aunque desarreglada.

Sobre las corbatas: Por lo general me gusta que me desvistan, ellas comienzan primero por quitarme el pantalón, ninguna se detuvo antes en los zapatos, prenda poco erótica) o por soltarme la corbata (si se usa), o me gusta quitármela yo, sin deshacerla, para atar las manos de mi compañera de juegos.

Buddy